Tambièn producen monstruos
la fuerza que la razòn esgrime,
la matematica del espejo
dos y dos son cuatro,
los puntos de referencia,
mañana,
las reglas que ejecutan el juego
y el credo anametizador que poscribe
lo inconmesurable;
Yo,
la esfera,
amor o el fuego que se comparte,
la Mùsica, la liturgia del desorden
y entre otras magias
la belleza del azar en accidente
como por ejemplo
morir.
Luis Eduardo Aute.
domingo, 22 de marzo de 2009
Liturgia del desorden
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